🔸 Las ordenaciones se realizarán del 20 al 31 de enero en las parroquias de los nuevos sacerdotes. La Diócesis busca reforzar la atención espiritual.
#QUERÉTARO | La Diócesis de Querétaro contará con 11 nuevos sacerdotes en enero de 2025, un hecho que, a decir de su vocero Martín Lara Becerril, marca un cambio esperanzador para la iglesia queretana tras las dificultades enfrentadas derivado de la pandemia, periodo en el que fallecieron ocho sacerdotes y las ordenaciones se redujeron.
Martín Lara Becerril detalló que las ordenaciones iniciarán el 20 de enero de 2025 y se realizarán una por día en las comunidades parroquiales de los nuevos sacerdotes.
“A partir del 20 de enero, uno cada día se va a ordenar un sacerdote. Serán 11 que se ordenen en sus respectivas comunidades parroquiales. Al final de enero tendremos 11 nuevos para la diócesis”, explicó.
El vocero recordó que la pandemia representó un golpe importante para la iglesia en Querétaro, no solo por la pérdida de ocho sacerdotes, sino por la disminución de nuevas ordenaciones.
“En pandemia murieron ocho sacerdotes queretanos y ciertamente hemos estado con pocas ordenaciones, pero hoy contaremos con la bendición de 11. Felicitamos a todos los diáconos que esperan su ordenación”, comentó.
Lara Becerril destacó que las ordenaciones coinciden con el jubileo de la esperanza, un periodo que refuerza el compromiso de la iglesia con la comunidad.
“Se ordenan 11 y es un signo de esperanza. Ellos reforzarán las parroquias, porque hay una gran necesidad espiritual. Día con día, a Querétaro llegan alrededor de 100 familias, y desde luego, las necesidades espirituales crecen”, explicó Martín Lara Becerril.
El crecimiento poblacional del estado plantea retos importantes para la Diócesis, particularmente en parroquias con alta densidad de habitantes.
“La población sigue siendo mayoría católica y las necesidades hay que atenderlas. Ahorita les puedo decir que la parroquia más grande de habitantes es la de Nuestra Señora de la Luz, allá en Cerrito Colorado, que tiene 100 mil habitantes. Es mucha gente para una sola parroquia y necesita la atención y presencia sacerdotal”, explicó.