La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) señala a México como uno de los países de América Latina y el Caribe que puede mejorar en cuanto a datos abiertos gubernamentales.
La OCDE presentó su Panorama de las Administraciones Públicas, en el que asignó un apartado a los datos abiertos gubernamentales.
Detalla que los datos constituyen uno de los recursos más valiosos del mundo actual.
Las políticas de datos abiertos gubernamentales (DAG) buscan garantizar que todo el mundo tenga acceso a los datos de los organismos públicos en formatos abiertos, gratuitos y accesibles”, indica.
Para la OCDE, los DAG se han convertido en cruciales para abordar cuestiones políticas tanto antiguas como emergentes, tales como la pandemia de COVID-19 y la transición a energías verdes.
Pero de acuerdo con el Índice de Datos Abiertos, Útiles y Reutilizables (OURdata), los seis países de América Latina y el Caribe que forman parte de este obtuvieron en promedio una puntuación de 0.37, sobre un máximo de 1.
Brasil, Colombia y Perú se situaron por encima de la media, demostrando políticas de datos abiertos más maduras, en particular en el ámbito de la disponibilidad de datos.
Por otra parte, México registró 0.27 con un margen de mejora “especialmente en el apoyo gubernamental a la reutilización de datos“.
Costa Rica obtuvo 0.19 y Chile 0.13, según el índice.
Los países por debajo del promedio podrían mejorar en tres pilares:
El de la disponibilidad de datos abiertos, que mide la adopción e implementación de los países de los DAG. Evalúa además la consulta con partes interesadas para identificar la demanda de dichos datos y si los conjuntos de datos de alto valor están disponibles en formato abierto.
El segundo pilar refiere a la accesibilidad de los datos, que mide tanto la existencia de requisitos para proporcionar datos en formatos abiertos, oportunos y reutilizables, con metadatos de buena calidad, suministrados a través de interfaces de programación de aplicaciones, así como la aplicación de esos requisitos.
Por último, el apoyo gubernamental a la reutilización de datos. Este mide el grado en que los gobiernos promueven proactivamente la reutilización de DAG dentro y fuera del gobierno.